Las operaciones, sean sencillas o complicadas, nunca me han gustado. Supongo que a nadie, claro. Pero a veces son inevitables.
Hace unos meses a Dani le vimos que el dedito gordo de la mano izquierda estaba como inmovilizado. Al intentar forzar su movimiento, vimos que estaba como atrancado. Asique fuimos al pediatra, que dió un primer diagnostico: Dani tenía el dedo "en gatillo" como comunmente se denomina esta afección. Y que necesitaba operarse porque era la única solución.
Operarse. Ya la palabra da yuyu. Aunque sea una operación sencilla, aunque no tenga ni que pasar la noche allí. Aunque dure 5 minutos. ES una operación. Y siendo tan pequeño, tienen que dormirle entero (cuando son más mayores es anestesia local).
La operación en sí consistía en abrir por la base del dedo gordo, y dejar libre el tendón atrapado por alguno de los "puentes" que lo atrapan, que por nacimiento habría quedado así. De hecho es algo genético, lo cual explica que a mí también se me "atranque" el mismo dedo que a él, pero con la diferencia de que yo lo suelto. Y de hecho también le pasa en la otra mano, pero de forma igual que a mí, y muy esporádicamente. Espero que con el tiempo no tengamos que operarle, pero existe la posibilidad, claro.
Una operación sencilla, ambulatoria, sin ingreso, con corta duración...pero con anestesia total. Algo que no me gusta nada, pese a que con la biopsia del año pasado ya pasamos una y en principio no es nada...pero las anestesias siempre tienen su riesgo, y no me gustan.
Pues bien, después de unos meses de espera, nos llamaron hace unos 15 días, que le operaban ya. Y encima con la casa a medias. Es que nos cae todo a la vez...en fín...
Pero bueno, la operación al final fué un éxito. Dani entró al quirofano medio "pedo" (les dan un jarabe que les atonta) y no se debió enterar de nada. Se enteró cuando salió, con la vía puesta y la mano vendada. ¡Menudo rebote se pilló!. Normal, entras contento y sales "jodido", a ver a quien no le cabrea eso X-D.
Después de un par de horas de berrinche, nos pudimos ir a casa, con Dani más contento. Al principio recelaba un poco de coger las cosas con su "mano Robocop" como la bautizé para quitar hierro al asunto, pero conforme pasaron los días ya poco le importaba el vendaje.
Hace un par de días le quitaron el vendaje y dejaron la mano libre, y tiene una bonita cicatriz que con el tiempo desaparecerá o minimizará, pero tiene un aspecto bueno. Como la anterior vez, al principio le costó aceptar la nueva situación, pero por la tarde ya le dió todo igual y como si nada.
Asique todo vuelve a la normalidad habitual, y espero que no tengamos más "sustos" de estos durante bastante tiempo (aunque me gustaría que fuese nunca, eso es algo que no siempre se puede controlar al 100%).
3 comentarios:
Me alegro de que todo fuese bien.
Animo..., que el chaval, por lo que explicas, ya está bién. Cuando sea mayor, será una bonita historia que le explicaréis.
Venga ánimo que ya pasó el susto...estas cosas alarman un poco, pero ya ves que todo ha salido bien.
Saludos.
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